domingo, 30 de enero de 2011

MARIO VARGAS LLOSA EN EL PAÍS: TAN LÚCIDO COMO IRÓNICO



LEER ENTRE LÍNEAS

Un texto lúcido –espléndido, ¿irónico?- a prueba de lectores fugaces:

TRIBUNA: MARIO VARGAS LLOSA

Los réprobos

(Texto completo)

(…)

Al mismo tiempo que hojeaba en la prensa lo ocurrido en Francia con el cincuentenario de Céline, leí en EL PAÍS (Madrid, 23 de enero de 2011) un artículo de Borja Hermoso titulado La rehabilitación de Roman Polanski. En efecto, el gran cineasta polaco-francés es, ahora, algo así como un héroe de la libertad, después que una espectacular campaña mediática, en la que grandes artistas, actores, escritores y directores, abogaron por él, y consiguieron que la justicia suiza se negara a extraditarlo a Estados Unidos. Esto fue celebrado como una victoria contra la terrible injusticia de la que, por lo visto, había sido víctima por parte de los jueces norteamericanos, que se empeñaban en juzgarlo por esta menudencia: haber atraído con engaños, en Hollywood, a una casa vacía, a una niña de 13 años a la que primero drogó y luego sodomizó. ¡Pobre cineasta! Pese a su enorme talento, los abusivos tribunales estadounidenses querían sancionarlo por esa travesura. Él, entonces, huyó a París. Menos mal que un país como Francia, donde se respetan la cultura y el talento, le ofreció exilio y protección, y le ha permitido seguir produciendo las excelentes obras cinematográficas que ahora ganan premios por doquier. Confieso que esta historia me produce las mismas náuseas que tuve cuando me sumergí hace medio siglo en las putrefactas páginas de Bagatelles pour un masacre.

2 comentarios:

  1. Hubo otros hombres miserables, famosos como artistas y escritores, quienes continúan siendo los héroes de las poblaciones, sobretodo de la Izquierda. Tenemos a Pablo Neruda y Salvador Dalí. El primero un estalinista virulento que abandonó a su destino a los refugiados de la Guerra Civil de España, sólo porque no estaban inscritos al Partido Comunista. El poeta embajador de Chile, Neruda, estaba a cargo de salvar a los que huían de la dictadura de Franco y el genocidio de Hitler y los discriminó de manera inhumana. También era una antisemita exacerbado, como su amigo Salvador Allende, quien, en su tesis doctoral, dijo: “Los hebreos se caracterizan por determinadas formas de delito: estafa, falsedad, calumnia y, sobre todo, la usura”. El miserable de Dalí, entre otras infamias, denunció al más grande cineasta español Luis Buñuel (y uno de los genios del cine mundial) de comunista y como Dalí era un gran franquista católico consiguió el apoyo del Cardenal de Nueva York para que expulsaran a Buñuel de los Estados Unidos. Dalí era gran admirador de Hitler. Moraleja: los artistas y escritores inmorales nunca van a crear un mundo mejor. ¿De qué sirve entonces la literatura y el arte? Ni Ezra Pound ni T. S. Eliot jamás participaron activamente en el Holocausto. Ser antisemita y ser genocida son dos cosas diferentes. Incluso el ejército fascita de Mussolini nunca asesinó a judíos, más bien los liberó en muchas ocasiones en territorio francés ocupado por los nazis.

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  2. Ni Ezra Pound ni T. S. Eliot jamás participaron activamente en el Holocausto. Ser antisemita y ser genocida son dos cosas diferentes. Incluso el ejército fascita de Mussolini nunca asesinó a judíos, más bien los liberó en muchas ocasiones en territorio francés ocupado por los nazis.

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